Que este mes nos permita reflexionar acerca de esa aventura que vive cada gota de agua para llegar a nuestros hogares. ¿Cuántas veces al abrir la llave, nos preguntamos por el recorrido que este líquido vital logró para llegar a nuestros baños, cocinas, a nosotros?
EPM, más que un servicio que termina en una factura es bienestar a través de nuestros procesos e infraestructura; disponemos todo para entregar este servicio y asegurar el recorrido del líquido hasta la comodidad de los hogares de cerca de 1 millón cuatrocientos clientes del Valle de Aburrá y Rionegro, de los cuales 28.016 tienen la opción de agua prepago.
Todo empieza con la captación del agua desde diferentes fuentes hídricas en zonas del occidente y el oriente cercano y nuestros tres grandes embalses: Riogrande II, La Fe y Piedras Blancas, con los cuales abastecemos a cerca del 90% de la población del mismo y de Rionegro; así mismo, contamos con unas 28 fuentes hídricas menores, con las que abastecemos el 10% restante de la población, que alimentan en total 13 plantas de potabilización de agua, ubicadas en puntos estratégicos del Valle de Aburrá (Caldas, San Antonio de Prado, Aguas Frías, San Cristóbal, La Ayurá, La Cascada, La Montaña, Villa Hermosa, Manantiales, Barbosa, Palmitas, San Nicolás y Rionegro), que producen cerca de 303 millones de metros cúbicos de agua al año, los cuales pasan por una serie de procesos físicos, químicos y microbiológicos que la hacen apta para el consumo humano (oxidación, adsorción, coagulación, floculación, sedimentación, filtración, desinfección, estabilización de PH), eliminando microorganismos, impurezas orgánicas e inorgánicas con altos estándares de tratamiento de agua, haciéndola apta y segura para ser consumida con total tranquilidad.
Además de potabilizar el agua, buscamos que este líquido llegue a la mayor cantidad de territorios, a través de más de 4.400 kilómetros de redes de acueducto en el Valle de Aburrá de Norte a Sur, enfrentando terrenos desafiantes, por tierra y cielo, reconociéndonos como la empresa con la mejor agua del país y con un índice de continuidad de un 99.8%.
Cuando este objetivo se logra y el proceso de consumo por parte del usuario ha finalizado, seguimos ahí, con nuestros sistemas de recolección para tratamiento de esas aguas residuales a través